lunes, 3 de agosto de 2009

Ante el cierre de emisoras de radio

Escuela de Comunicación Social de la Universidad Central de Venezuela

Comunicado


Manifestamos a la Opinión Pública Nacional nuestro firme rechazo a la forma como se ha procedido en el caso de la salida del aire de diversas emisoras de radio. Reconocemos que el cumplimiento de la legalidad debe ser un principio básico del funcionamiento de una sociedad democrática. Entendemos que las decisiones públicas no deben generar daños excesivos sobre los afectados y sobre sus derechos, aún si se trata de resarcir una falta o resolver una situación indebida. En el caso actual no se han abierto los procedimientos administrativos de ley que permitan el derecho a la defensa de los afectados ni el cumplimiento de los lapsos que permitan el correcto ejercicio de ese derecho. Los procedimientos administrativos que han resultado en el cese de las transmisiones de más de 35 emisoras de radio han afectado gravemente el principio de división de los poderes públicos y ponen en entredicho el correcto funcionamiento de la legalidad; dejando a la ciudadanía desamparada ante la actuación discrecional del Estado.

Manifestamos nuestras convicciones democráticas y nuestra disposición a defender de manera irrestricta el Estado de Derecho. El cierre de un canal de comunicación implica una limitación seria del acceso a la información y de la posibilidad de manifestarse públicamente. La libertad de expresión exige la presencia de un discurso público amplio y diverso. La manifestación de valores, creencias e ideas no puede estar sujeta a presiones indebidas o tener como consecuencia daños para las personas.

Llamamos a la reflexión a la Sociedad venezolana para que asuma esta coyuntura no como la defensa de intereses privados particulares, sino como la defensa de aquellos derechos ciudadanos que garantizan la convivencia democrática. Expresamos públicamente nuestra solidaridad con las personas e instituciones afectadas por esta lamentable situación y hacemos votos para que las instituciones del Estado revisen esta situación en restitución de los derechos y garantías que son propios de una sociedad democrática constitucional.

Miguel Ángel Latouche
Director

Carlos Gutiérrez
Coordinador Académico


Abraham Rivero
Coordinador Administrativo

miércoles, 15 de abril de 2009

Cambio de Pensum


A lo largo de varios años y en diversas instancias se ha venido planteando en la ECS la necesidad de revisar nuestro pensum de estudios así como la estructura académico administrativa de la escuela. En referencia a lo primero se debe destacar que, tal y como es bien conocido por nuestra comunidad, el pensum de estudios data de 1987 y se encuentra estructurado desde una comprensión del problema de la comunicación social afianzada en los paradigmas y concepciones que se encontraban vigentes en el momento en que fue concebido. No existe en la lógica universitaria la posibilidad de ir adecuando la totalidad de los Planes de estudios a los cambios que se pudieran ir produciendo en las diversas disciplinas. Por el contrario la lógica académica nos obliga a irlos acumulando hasta que ya la necesidad de adecuarnos a los ‘nuevos tiempos’ nos obliga a asumir la tarea de ajustar la manera como nuestros programas de formación son concebidos.
Ciertamente hemos iniciado el proceso de revisión y actualización de los programas de los diferentes departamentos. Esa tarea es crucial y debemos finalizarla a la brevedad a los efectos de que este cuerpo apruebe los nuevos programas con bibliografía actualizada y adecuada y con mayor claridad en cuanto a los objetivos planteados en cada uno de ellos. Esta actividad que es perentoria es, sin embargo, insuficiente. En mi opinión debemos transitar hacia una revisión extensiva y total del pensum de la escuela. Esa parece ser ya una actividad que no podemos postergar. Existen problemas concretos que vale la pena destacar: Por una parte no parece haber coherencia en la disposición de las materias. Uno entendería, por ejemplo, que las materias del Departamento de Métodos deberían estar ubicadas en los primeros semestres de la carrera, esto es particularmente cierto en el caso de informática. Lo mismo sucede con materias como geografía y política internacional, problemas sociales, las cuales a pesar de los esfuerzos realizados por los profesores parecen aisladas o con una conexión insuficiente con el resto de las asignaturas que constituyen la totalidad del programa de estudios.
Creo que necesitamos un mayor vínculo entre los departamentos. Las asignaturas de cada uno de ellos deben cruzarse de manera transdisciplinar de manera que la formación de los futuros profesionales sea mucho más consistente. En lugar de tener departamentos separados como islas, debemos definir un mecanismo que nos permita interconectarlos, de modo que el trabajo que se produzca en cada uno de ellos sea relevante para el de los demás. Debemos revisar el tema de las competencias, creo que nos encontraremos con que las mismas no responden de manera adecuada a las necesidades del mercado laboral, ni a las necesidades académicas de la lógica comunicacional. De alguna manera nos encontramos trabajando a destiempo desde una concepción de la comunicación y de sus problemas que se ubica a finales de la década de los ochenta del siglo pasado. No podemos asumir los retos de los tiempos que vivimos desde una concepción de la ECS, de sus problemas, de su manera de organizarse que data de hace 22 años. No podemos hacerlo sin revisar de manera exhaustiva el perfil de nuestros egresados. No podemos hacerlo sin repensar a la escuela desde el ámbito de logos y desde el ámbito de la praxis con la intención de incorporar los saberes de estos ámbitos de conocimientos y encauzarlos en la formación de un comunicador verdaderamente integral.
Es imprescindible que organicemos y participemos en una serie de actividades que nos lleven a establecer un espacio de discusión sobre la temática planteada. Desde la Dirección y desde la Coordinación Académica de la ECS convocamos a este esfuerzo de revisión, actualización y adecuación y solicitamos el apoyo y el compromiso del Consejo de Escuela. En este sentido es propicia la ocasión para solicitar que se establezca de manera inmediata una Comisión Ad- Hoc para la revisión del Pensum. Una primera actividad de esa Comisión debe ser la de revisar los materiales que sobre esta materia reposan en la Biblioteca Gustavo Leal y que son el resultado del trabajo que en este sentido fuera realzado por la comunidad de la escuela hace ya unos años. Una segunda actividad debe ser la de convocar y organizar a la brevedad la primera reunión ampliada de trabajo con la participación de los Jefes de Departamento y de Cátedra y de profesores interesados. Una tercera tarea debe ser la de organizar el curso de Curriculum por Competencias que dicta SADPRO, para lo cual se está a la espera de la oferta económica que será asumida por la ECS y que tiene como finalidad proporcionarnos las herramientas que fueran necesarias para asumir coherentemente el proceso de cambio de nuestro programa de estudios. Estas tareas son urgentes en vista de que las mismas responden, a mi entender, a una serie de necesidades y aspiraciones sentidas por la comunidad académica de la escuela.
En cuanto al segundo asunto mencionado, es necesario que revisemos la manera como se organiza en lo académico- administrativo la escuela. Tenemos ocho departamentos y un número excesivo de cátedras. Se trata de una escuela que fue concebida en un momento estelar en el cual contábamos con un número suficiente de profesores de tiempo completo y dedicación exclusiva, los cuales se han ido jubilando, sin que hubiera sido posible garantizar una reposición de cargos equivalente. Por el contrario, muchos de estos cargos docentes han sido sustituidos por profesores de medio tiempo, convencionales y/ u horas tarima. Esto ha puesto en cuestionamiento nuestra capacidad para realizar actividades de investigación y extensión; para convocar a la participación en diversas comisiones, incluso para llenar los cargos vacantes en las diversas cátedras y departamentos.
Es necesario que pensemos en una estructura departamental más ágil y flexible, que permita utilizar de manera más racional los recursos docentes disponibles en la escuela. Pero más importante aún, es necesario que transitemos hacia una concepción departamental de carácter interdisciplinario, en la cual se produzcan una confluencia entre los saberes de las diversas disciplinas y se produzca una ‘construcción conceptual’ más consistente y de mayor coherencia de cara al cambio de Programa de Estudios que ha quedado planteado. Sobre esta materia hay mucho que discutir. Después de todo es necesario garantizar que cada ‘espacio académico’ diferenciable tenga un reconocimiento que se traduzca en la existencia de un departamento, pero, de igual manera, es necesario que se realice una distribución más consistente de las asignaturas y de los conocimientos asociados.
Una propuesta inicial es la de unificar los departamentos de Cs Políticas y Sociales y el de Cs. de la Comunicación en lo que sería un Departamento de Cs. de la Comunicación y Sociedad. Vale destacar que ambos departamentos refieren sus actividades a la formación en categorías teórico- conceptuales en el ámbito de la Comunicación Social. En mi opinión no existe una razón académica válida que justifique que las asignaturas de estos departamentos no se encuentren ubicadas bajo la misma nomenclatura. La integración de estos departamentos favorecerá la metaconstrucción teórica de una concepción acerca de la Comunicación Social que es susceptible de contribuir eficientemente a la redefinición de nuestro programa de estudio. La complementariedad de las materias de estos departamentos y su vocación teórico- conceptual nos hacen pensar en un departamento integrado que garantice que la consistencia teórico- conceptual de nuestros egresados.
Entendemos que el Departamento de Cs de la Comunicación y Sociedad debe constituirse en un punto de convergencia entre los diferentes elementos que suman a la formación profesional de los egresados de la escuela en lo que se refiere a aspectos teóricos y conceptuales de carácter interdisciplinario que contribuyan a garantizar una comprensión consistente acerca de la Comunicación Social concebida como proceso, así como de los problemas asociados con ésta. Entendemos que desde esa comprensión las asignaturas del departamento sirven de apoyo a las diferentes áreas profesionales y de carácter práctico que confluyen en la determinación del programa de estudios de la escuela, constituyéndose en un espacio para la confluencia de lo científico, lo filosófico, lo sociológico, lo político con lo propiamente comunicacional. Este departamento debe cumplir con los siguientes objetivos:
– Auspiciar la discusión conceptual y la construcción de categorías teórico- metodológicas en el ámbito de la comunicación social.
– Suministrar información y formación en las diversas áreas de estudio y acerca de los diversos enfoques que constituyen el ámbito de discusión de la Teoría de la Comunicación y de las Cs. de la Sociedad, desde una perspectiva amplia que incorpore transdisciplinariamente diversas categorías y concepciones teóricas.
– Apoyar el estudio de los aspectos teóricos, conceptuales, epistemológicos y ontológicos que se incorporan al estudio de la Comunicación Social desde una perspectiva transdisciplinaria.
– Estimular el pensamiento crítico y la incorporación de categorías teórico- conceptuales.
– Contribuir en la construcción de una visión integrada de la teoría y la práctica de la comunicación social que se fundamente en una comprensión adecuada y consistente acerca del contexto comunicacional del país desde una perspectiva histórica y actual.
Lo anterior en función de la siguiente estructura:
– Cátedra de Teorías de la Comunicación: Psicología de la comunicación, Teoría de la Comunicación, Sociopolítica de la comunicación, Teoría de la Opinión Pública, Pensamiento Filosófico, Filosofía de la Comunicación, Seminarios y/ o materias optativas.
– Cátedra de Cs. Políticas y Sociales: Política Internacional, Problemas Sociales Contemporáneos, Geografía, Historia de América, Historia de Venezuela, Historia de la Comunicación, Ética y Legislación, Seminarios y/ o materias optativas.

Vale destacar que además de lo ya mencionado, la integración del Departamento de Cs. Políticas y Sociales con el Departamento de Cs de la Comunicación en un Departamento de Cs. de la Comunicación y Sociedad, garantiza la existencia de un departamento con una estructura funcional en la cual se contaría con un número importante de profesores de tiempo completo y medio tiempo, algunos de los cuales participan en el PPI y adelantan actividades de investigación y extensión.

domingo, 15 de marzo de 2009

Control de contenidos en Venezuela


Partamos de la siguiente idea: para vivir en democracia un ciudadano debe estar bien informado. Esto implica, por una parte el desarrollo de una serie de capacidades para el análisis de la realidad, la elaboración de categorías y la posibilidad de procesar información y trasmitirla a los demás. Por otra parte, implica el acceso amplio a la información que nos interesa. Esto último es crucial, particularmente en lo que respecta a la información pública o a aquella que es susceptible de afectarnos en lo personal, de definir nuestros valores y percepciones. El tema viene al caso toda vez que en la discusión pública venezolana se ha planteado la posibilidad de que la Asamblea Nacional discuta un proyecto de ley que busca regular la cobertura informativa de los medios privados.
El argumento tiene un tono clásico, se dice que el manejo que estos medios realizan acerca de la información pública “tergiversa” la realidad nacional y perjudica la obra del gobierno. Digo que el argumento es clásico porque a estas alturas los venezolanos ya estamos acostumbrados a diez años de explicaciones y acusaciones por medios de las cuales el gobierno intenta culpar a los demás de su ineficiencia, o, en todo caso, intenta hacernos creer que vivimos en un país idílico en el cual las cosas funcionan normalmente. Así pues, los hechos de corrupción, los ataques a los medios de comunicación, la delincuencia generalizada, los asesinatos de fin de semana, son el resultado de la “manipulación mediática”. Son los medios los que hacen una lectura interesada de la realidad que busca afectar negativamente la gestión del gobierno.
Acá nos encontramos con varios asuntos. Ciertamente cada uno de nosotros tiene en determinadas circunstancias “posturas interesadas”. En general no somos objetivos en la lectura que hacemos acerca de determinados asuntos, más aun, nuestra subjetividad e intereses ’juegan’ en la determinación de la valoración que hacemos acerca de las cosas. En este sentido, uno bien podría aceptar que los medios de comunicación puedan realizar una mirada interesada de la realidad y que, en consecuencia, trasmitan información acerca de algunos temas desde una óptica determinada que pudiera en un momento determinado favorecer unos intereses y desfavorecer algunos otros.
El Presidente de la Comisión de Ciencia, Tecnología y Medios de Comunicación de la Asamblea Nacional, Diputado Manuel Villalba, ha señalado que los medios “no informan debidamente a la ciudadanía, sino que por el contrario, se han dedicado a desvirtuar la realidad y a crear caos y confusión al lector y al televidente”. Tendríamos que preguntarle al Diputado quién califica la calidad de la información transmitida a través de los medios o si, a fin de cuentas, la sociedad sólo debe validar la información que es transmitida por los medios oficiales, o si el gobierno debe mantener un control absoluto sobre la cobertura informativa y sobre la programación de los medios de comunicación, o si debemos limitar las críticas.
La democracia implica la posibilidad de que los mas diversos puntos de vista puedan ser considerados por quienes participan de la discusión pública. La opinión de los ciudadanos y sus valoraciones acerca de las actuaciones gubernamentales deben ser el resultado de la evaluación que hacen acerca de las mismas y de la manera como éstas afectan sus vidas. De manera que en una sociedad abierta los diversos puntos de vista deben tener la posibilidad real de expresarse, para ello los medios deben tener diversas garantías: por un lado debe existir acceso real a la información pública, particularmente a aquella que emana de instancias gubernamentales, por otro no deben existir restricciones en cuanto a la línea editorial que sigan en el cumplimiento responsable de la función de informar.
En una democracia el Estado debe estar sometido de manera permanente al escrutinio público. La acción de los funcionarios tiene un carácter representativo, en consecuencia el control de sus actuaciones debe entenderse como un hecho natural. Es evidente que una parte importante de esa función de control es realizada por los periodistas y es presentada al público a través de los medios de comunicación. Si bien la actuación de los medios debe ser responsable y debe estar atada a posturas y valoraciones de carácter ético, éstas no tienen porque tener un carácter complaciente al gobierno. Cuando el Estado busca controlar en exceso, como es en mi criterio lo que sucede con la propuesta de Ley antes señalada, crea suspicacias, ¿acaso hay algo que esconder?

domingo, 9 de noviembre de 2008

Algunas ideas para pensar a la Universidad de nuestro tiempo.


I. - Vivir de manera más o menos civilizada durante la Época Medieval, era vivir dentro de los límites de la ciudad amurallada. Los muros de la ciudad representan una imagen poderosa: Estos se erigen para proteger a los hombres de los embates de un mundo incivilizado y salvaje en el cual las garantías para la supervivencia individual estaban referidas a la lógica de supra- subordinación que se produce entre los siervos y el Señor Feudal como resultado de la ‘imposturas de las manos’. Institución mediante la cual se ‘cierra’ un compromiso de servidumbre que contempla, en contraprestación, la protección militar y el establecimiento de ciertas garantías para la supervivencia individual y grupal. Se definía, de esa manera, un mecanismo de salvaguarda que permitía la reproducción de la vida pública, en el entendido de que la misma se estructuraba en los mercados y en las cortes, siendo aquellos los sitios en los cuales era natural que la población se encontrase para intercambiar productos, para enterarse de las noticias cotidianas o para escuchar el mandato que se establecía desde la estructura jerárquica del poder medieval.
En general, el medioevo es considerado como una época signada por el oscurantismo. La ruptura de la organización romana producida por las invasiones bárbaras y la desconsolidación paulatina del imperio, dieron origen a instancias ordenadoras de carácter local, cuyo poder se encontraba limitado y necesitaba ser defendido de manera permanente en medio de una circunstancia en la cual la ausencia de caminos y las dificultades de interconexión hacía que la vida en sociedad, la vida civilizada sólo fuese posible dentro de la ciudad amurallada. Los muros, entonces, garantizaban algún nivel de seguridad para quienes se encontraban dentro de sus límites, al tiempo que establecían una clara diferenciación entre quienes pertenecían, y los que no, al ámbito del colectivo que se encontraban contenido dentro de ellos. Los muros permitían una clara diferenciación entre unos y otros, no sólo hacían posible que se mantuviesen fuera quienes no pertenecían a la comunidad política, sino que también definían a quienes pertenecían a aquella.
A lo largo de la época Medieval se produce, sin embargo, un hecho crucial para la historia de la humanidad: El conocimiento es salvaguardado y trasmitido de generación en generación mediante la reproducción manual de los libros que contenían el pensamiento del mundo antiguo. Los oscuros monasterios medievales con sus lúgubres pasillos y sus amplias salas para la meditación silenciosa, no sólo se constituyeron en ejes centrales de la intriga política y del ejercicio del poder; sino que adicionalmente se constituyeron en el refugio del conocimiento que se había desarrollado durante la antigüedad para adormitarse en el sino lejano de los tiempos, durante casi diez siglos. Cuando observamos el arte de la época, particularmente la iconografía, nos encontramos con una representación permanente acerca de Dios y acerca de lo divino, los hombres se constituían, después de todo, en función a su relación con Dios.
De manera que los hombres, en genérico, existían y eran reconocidos como seres humanos en términos de sus potencialidades en tanto y en cuanto existiese una relación identificable con Dios. La individualidad de los sujetos se diluía en el término de su relación con la divinidad y en términos del cumplimiento de su mandato. Dios era el centro del Universo. El poder político se legitimaba mediante la ‘unción’ que provenía de Dios y de la iglesia y se realizaba por vía del mandato que era proporcionado por el reconocimiento que la Iglesia de Roma hacia del mismo. Por eso, perdón por la digresión, la imagen de Napoleón tomando la corona con sus propias manos y colocándosela a sí mismo, es tan poderosa: nos está diciendo, sin que venga al caso analizar al personaje, que la legitimidad de su poder no tiene un origen divino, sino terrenal, lo que implica una ruptura profunda con la pretensión eclesiástica de monopolizar el ejercicio de la legitimación política.
Entonces, fue, precisamente, en aquel proceso de transcripción y resguardo del pensamiento antiguo en el que se jugó la posibilidad de redescubrir el espíritu de lo humano y la esencialidad del hombre como eje central de la convivencia pública. No en vano Popper señala que la labor de las bibliotecas como recolectoras y protectoras del conocimiento humano ha sido esencial para la evolución de nuestras formas modernas de organización colectiva. Si se produjese un Holocausto Nuclear – refiere Popper- en el cual pequeños grupos humanos lograran sobrevivir y, al mismo tiempo, algunas bibliotecas se salvaran de la destrucción, los sobrevivientes tendrían la posibilidad de utilizar el conocimiento albergado en los libros y desde allí reiniciar la aventura de establecer un mecanismo civilizado para la convivencia humana. En el caso de que las bibliotecas fuesen destruidas la civilización tendría que empezar desde cero. En la salvaguarda de los textos antiguos se establece la simiente que permitió el Renacimiento.


II. - Desde el punto de vista estatutario nuestra universidad tiene un carácter Republicano. De sus orígenes medievales hemos heredado la estructura del Claustro universitario y una ordenación jerárquica que se define a partir de los sistemas de ascenso dentro del escalafón universitario. Pero de igual manera, hemos heredado un imaginario que nos ha llevado a mirarnos hacia dentro y a mantenernos distantes del mundo que nos circunda. Ciertamente, la universidad tiene la responsabilidad de resguardar el conocimiento, pero también tiene la responsabilidad de producirlo y de reproducirlo en términos de que pueda ser trasmitirlo a los estudiantes. Ese conocimiento tiene que ser relevante para el desarrollo del país, para ello debe estar actualizado, debe incorporar categorías teórico- conceptuales consistentes y tener un alto grado de pertinencia, pero adicionalmente debe proporcionarle al egresado un conjunto de herramientas que le permita insertarse de manera exitosa y competitiva en el ámbito laboral y contribuir con el mantenimiento del espacio público dentro del cual se produce nuestra convivencia como colectivo.
Ya lo decía Ortega y Gasset, la Universidad no tiene la responsabilidad de producir eruditos y/ o genios, esa es una actividad individual que asumirán quienes decidan adelantar sus vidas a lo largo de lo que Weber ha llamado ‘la ruta de los sabios’. La Universidad, sin embargo, tiene la responsabilidad de contribuir a que sus egresados adquieran una serie de condiciones que les permitan que sus vidas sean vidas relevantes en el sentido de lo que implica, como diría Sen, vivir una vida que valga la pena vivir.
La misión de la Universidad no se circunscribe a la formación profesional que adquieren sus estudiantes, por el contrario esa función esencial debe estar complementada por las actividades de investigación y de extensión universitaria. El trabajo de la Universidad debe ‘jugarse’ en dos niveles: Hacia adentro en lo que respecta con la consolidación de su estructura funcional y hacia afuera en lo que tiene que ver con su propio posicionamiento de cara al país. En cuanto al primer aspecto es necesario fortalecer y mejorar el funcionamiento docente, a través de la actualización permanente, del incremento de los sueldos, del establecimiento de estímulos y reivindicaciones laborales. Pero también mediante la reposición de cargos, la apertura de concursos de oposición, el redimensionamiento de las Cátedras y los Departamentos.
Hacia afuera es necesario hacer más permeables los muros que de manera simbólica separan a la Universidad del país, esto a los fines de que la institución pueda impactar de manera más directa sobre el proceso de desarrollo del mismo. La Universidad necesita desbordarse sobre el país, impregnarlo con su ejemplo, con su capacidad de construir desde la reflexión profunda y desde la tolerancia. La universidad es por definición un ámbito para la discusión desde el respeto, un sitio en el cual cabemos todos con las diferencias que pudieran existir, un lugar donde el diálogo debe tener un carácter permanente. Para ello, creo, es necesario establecer un mayor número de redes e interconexiones en las cuales insertarnos. La contribución sustantiva de la Universidad de nuestro tiempo tiene que ver con su propia constitución en un ámbito para la construcción de lo público, para la confluencia desde la diferencia, para la agregación cooperativa. Al igual que las bibliotecas medievales la Universidad tiene la misión de salvaguardar el conocimiento, de protegerlo, de producirlo y trasmitirlo; al mismo tiempo que se constituye en un ámbito para la construcción del espacio público y para la protección de los valores que guían nuestra convivencia colectiva.

miércoles, 2 de julio de 2008

programa de asesoramiento y orientación estudiantil


Muchas veces tenemos dudas sobre el oficio o profesión adecuado a nuestros talentos e intereses, pero una vez que elegimos estudiar una carrera en particular lo hacemos con la íntima aspiración de ser los mejores.

El camino académico que se recorre para alcanzar esa meta no es fácil: adaptación a la Universidad, integración con el grupo de compañeros, métodos de estudio adecuados, uso de nuevos recursos, distancia entre la experiencia académica y lo que aspiramos sea nuestro ejercicio laboral, reaparición de dudas sobre nuestra elección, dificultades en las relaciones con los profesores y necesidad de planificación de nuestras vidas, entre muchos otros aspectos que permanecen aderezados por problemas personales diversos.

El programa de asesoramiento y orientación estudiantil tiene como objetivo fundamental ofrecer un sistema de atención al estudiante que permita ubicar y definir su problemática para prestarle la asesoría adecuada o remitirlo a los diferentes servicios de la Escuela relacionados con la misma (asesoramiento académico, jefatura de cátedra o departamental, reválidas o convalidación) y/o con instancias de carácter terapéutico en materia de resolución de problemas, toma de decisiones, autoestima, motivación, dificultades emocionales (depresión, ansiedad, estrés descompensado).

Profesores:
Carlos Gutiérrez, estudios de 4to nivel en Psicología de la Instrucción
Patricia Valderrama, Carlos Villarino y Norelis Alvarez, Psicólogos
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domingo, 29 de junio de 2008

Una Cosa Cada Día

Los retos que tenemos por delante en la ECS son múltiples en lo que sigue le presentamos a la comunidad una lista de algunas de las actividades que tenemos planteado adelantar en los próximos tres años.

Fortalecimiento institucional:
- Desarrollo e implementación del Plan Estratégico (PE) de la ECS bajo los lineamientos del PE de la FHE y del PE de la UCV.
- Actualización de los reglamentos de la Escuela y transparencia en su aplicación
- Reactivación y fortalecimiento de las Comisiones de Trabajo académico/ administrativo:
o Comisión de Deportes
o Comisión de Pasantías
o Comisión de Investigación
o Comisión de Asuntos Estudiantiles
o Comisión de Mesa (apoyo al Consejo de Escuela)
o Comisión de Extensión
o Comisión de Coordinación de Tesis (revisión de proyectos de tesis, homologación de criterios
o Comisión de Proyectos (Búsqueda de recursos CDCH – LOCTI)
o Comisión de Relaciones Interinstitucionales
o Comisión de publicaciones.
o Comisión de infraestructura.
o Comisión de Servicio Comunitario.
o Comisión de formación y actualización docente.
- Apertura de una Coordinación para el Turno Nocturno.
- Apoyo al rediseño de las políticas de ingreso propuestas por la FHE
- Creación de un Consejo de Egresados que apoye el desarrollo de la RED- ECS
- Ampliación de los Programas de Pasantía (nuevas oportunidades y mayor apoyo).
- Redefinición del Servicio Comunitario, desarrollo de un programa de construcción de Valor Público, creación de una Red- Comunitaria con instituciones públicas, privadas y con ONGs y establecimiento de un periódico comunitario.
- Rescate del Salón de Profesores, convertirlo en un sito de encuentro para la discusión, incorporación de computadoras con conexión a Internet y disponibilidad de la prensa diaria.
- Mejoramiento de los sistemas de seguridad de la ECS. Protección para las personas y para los equipos.
- Regularización de la situación contractual del personal administrativo, para garantizar su estabilidad laboral. Garantizar una atención oportuna y eficiente a los estudiantes y profesores y la disponibilidad de recursos básicos para el proceso de enseñanza/ aprendizaje.
- Mejoramiento de conocimientos, destrezas y capacidades del personal administrativo.
- Evitar el monopolio de llaves y equipos, establecer un sistema para su administración eficiente.
- Rendición permanente de cuentas, transparencia en el manejo administrativo.
- Establecimiento de relaciones de cooperación con el Colegio de Periodistas (Seminarios, cursos, extensión, mejoramiento profesional permanente).
- Creación del Grupo de Protocolo de la ECS.
- Fortalecimiento del Área de Comunicación de la FHE a través de la redefinición de la relación entre la ECS y el ININCO.
- Participación en los programas de internacionalización adelantados por la FHE.
- Creación de una cuenta de correo oficial ecs/ucv a toda la planta docente y al estudiantado.
- Darle apertura a una sala de correspondencia y de apoyo académico en la Planta Baja de la Escuela.
- Mejoramiento de la imagen institucional de la ECS

Proyecto Académico
- Apoyo permanente a la actualización y mejoramiento docente
- Trabajo coordinado con el Consejo de Escuela.
- Apuntalamiento institucional de las Cátedras y los Departamentos.
- Búsqueda de partidas para el mejoramiento de las dedicaciones docente, desde un criterio institucional, transparente y en función de las necesidades de la ECS.
- Apertura de Concursos de Oposición.
- Intercambio de experiencias académicas entre las diferentes escuelas de comunicación del país.
- Establecimiento de una política de captación de personal docente a través de los programas de preparadores, auxiliares docentes y de investigación de la FHE y a través de los programas del CDCH.
- Gestionar partidas para la reposición de cargos docentes.
- Definición y desarrollo de las Líneas de Investigación de la ECS. Incorporación de estudiantes y apoyo al desarrollo de tesis de grado.
- Asesoramiento académico.
- Programa de asesoramiento y orientación estudiantil, con el apoyo de la Cátedra de Psicología de la Comunicación.
- Mayor incorporación de la ECS en los Programas de Cooperación Interfacultades. (ampliación de la oferta de cursos).
- Desarrollo de programas de cursos de postgrado en áreas específicas que puedan ser acreditados a los postgrados de la facultad.
- Cursos de ampliación a través del desarrollo de programas a distancia que incorporen los medios telemáticos.
- Desarrollo de las Jornadas de Investigación de la ECS.
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Extensión
- Cine Foro ECS- UCV en coordinación con otras escuelas de la Facultad y con apoyo de la Cinemateca Nacional
- Taller literario ECS- UCV
- Cursos de extensión, formación permanente.
- Tertulias, foros, seminarios, con invitados especiales y como actividades complementarias a las actividades académicas de la ECS.
- Revisión de los Programa del Curso de Locución, entrega de cuentas a tiempo y con transparencia.
- Ampliación del programa de Cursos de Locución Regional, a través de convenios con instancias regionales y locales, con la idea de que podamos abaratar los costos de la logística y ampliar el margen de ganarías para ser utilizados en el fortalecimiento de los programas académicos, mejoramiento de la infraestructura, apoyo estudiantil.
- Redefinición de los Contenidos y Programas de la Cátedra Miguel Otero Silva.

Gerencia Académica
- Constituir al Consejo de Escuela en una instancia consultiva vital para la gestión académica de la ECS.
- Hacer transparente la gestión de la Coordinación académica, para garantizar el manejo correcto, democrático, plural y cooperativo de los recursos académicos de la Escuela.
- Gestión de puertas abiertas
- Reconstrucción de la presencia institucional y del liderazgo de la ECS ante la UCV y ante el país.
- Implementación de criterios técnicos en la toma de decisiones.
- Redefinición de la composición de la Comisión de equivalencias y reválidas.
- Revisión y mejoramiento del proceso de inscripción de la ECS. Incorporación docente y estudiantil al proceso y redefinición de la logística asociada.
- Establecimiento de un Ágora estudiantil que se constituya en una instancia de discusión sobre asuntos específicos.
- Rescate de la relaciones entre la ECS y la FHE.
- Fortalecimiento de la Plataforma Digital como herramienta de instrucción, investigación y extensión.
- Rescate de las ‘publicaciones ECS’: - Máximo dos cuartillas; Mediática; Pauta Libre, con la participación de estudiantes y profesores de la Escuela y como estímulo a los mejores trabajos estudiantiles de las diferentes cátedras de la Escuela.
- Defensa de la Libertad de expresión, la libertad de información y de la autonomía universitaria.

sábado, 28 de junio de 2008

¿Por qué es necesaria una Coordinación Nocturna?


Siempre ha existido una amenaza de suspensión definitiva de la jornada académica nocturna de la Escuela de Comunicación Social de la Universidad Central de Venezuela (ECS-UCV). Las razones, para algunos, sobran. Por ejemplo, uno de los argumentos más fuertes es que se ha creído que cerrar “la noche”, como se le conoce entre los estudiantes, sería de gran ayuda para concentrar al personal docente en el turno matutino y así ofrecer una mayor gama de asignaturas y seminarios. Sin embargo, estamos ante una realidad ineludible. Además de la tradición histórica del turno de la noche, la carrera de Comunicación Social siempre ha estado ligada al ejercicio profesional temprano, es decir, dada la naturaleza de la carrera y el oficio, los estudiantes entran al mercado laboral desde los primeros semestres. Aquí no ahondaré en el impacto (positivo o no) de esta situación en la formación académica del bachiller; pero sí es importante reflexionar sobre ella pues demuestra la importancia del turno de la noche y la obligación que tenemos todos los miembros de la comunidad académica de activar algún tipo de instancia que regule, administre y gerencia el conjunto de actividades que ocurren (y que bien podrían ocurrir) durante este segmento de la jornada diaria.
En los últimos años el deterioro académico y administrativo de la ECS-UCV se ha sentido en todos los ámbitos de nuestra vida académica. La falta de entusiasmo, tanto en clases, como en la extensión y la investigación, resulta evidente. La palabra “apatía” es la que mejor resume la situación. Esta escenario de inamovilidad académica, de falta de pensamiento crítico y de ausencia de diálogo para construir saberes se intensifica en las actividades del turno nocturno. Los estudiantes inscritos en este horario se limitan a asistir a sus clases y lamentablemente están imposibilitados de “vivir la academia”. Esto nos es culpa suya. La institucionalidad universitaria no le ofrece absolutamente nada que no sean sus clases. Las alumnas y los alumnos de la noche no poseen actividades residuales o complementarias y sólo tienen como opción segura conversar en los bancos externos del edificio. No encuentran además algún profesor que les pueda ayudar en temas de la administración de su carrera, asesoramiento académico en materias con dificultades, ayuda en la investigación y redacción de su trabajo de grado, orientación vocacional, entre otros aspectos. Los miembros de la comunidad ECS-UCV no cuentan con toda la gama de servicios culturales que ofrece la UCV en horas del día como conciertos, charlas y otras actividades extracurriculares. Toda esta situación tiene una influencia negativa en su percepción de la Escuela y la carrera, la cual se traduce en fallas en la prosecución y, peor aún, deserción definitiva.
Ante esta realidad, debemos asumir el compromiso de buscar vías prácticas y efectivas para rescatar la “vida” que requiere nuestra Escuela para sobrevivir. Y creo que justo ahora se presenta la oportunidad con el cambio de equipo directivo. A las puertas de una renovación absoluta de las autoridades, gracias a la consulta popular para el cambio de Director de la ECS-UCV, creemos que es posible introducir transformaciones sustanciales que permitan la reactivación integral de la Institución ECS-UCV, lo cual pasa definitivamente por darle la importancia que se merece el turno de la noche, no sólo como concepto y práctica, sino como comunidad, es decir, darle preeminencia a las personas (estudiantes, personal administrativo, profesoras y profesores) que hacen vida en este turno y diseñar un plan orgánico y permanente para ofrecer a esta comunidad el trato y los servicios que se merecen.
Por eso creo que la única solución posible es la creación de una Coordinación Nocturna. Una instancia administrativa y académica que asuma la gerencia de los servicios, recursos y actividades académicas y de extensión, lo cual permitiría un mejoramiento significativo en el funcionamiento de la ECS-UCV.

Un espacio de construcción colectiva
No es posible introducir un cambio de esta magnitud sin la participación de todos los miembros de la comunidad académica. Por ello es importante estar conscientes de que la creación de una Coordinación Nocturna no es meramente un ejercicio administrativo de lo que será la nueva Dirección de la ECS-UCV. Por el contrario, creemos que es necesaria la construcción colectiva, el trabajo integral entre profesores y estudiantado. Sólo así será posible que esta transformación sea efectiva. Los docentes, en el marco de la nueva pedagogía, nos debemos a los estudiantes, y esta nueva instancia estaría dirigida fundamentalmente al apoyo de los bachilleres para su formación intelectual y profesional. Pero para ello es necesario su integración activa en la programación de las actividades, en el diseño de las mismas, en la detección de las necesidades y en la ejecución de los programas que surjan de esta discusión.
Asimismo, creemos que es importante la atención a los docentes que estén asignados al turno nocturno. Las profesoras y los profesores igualmente se ven desasistidos cuando acuden a la Escuela en este horario.
Hay que aprovechar el posicionamiento de la Escuela de Comunicación Social de la UCV para proyectar aún más su imagen y renovar su percepción en la opinión pública y en la comunidad académica nacional. Por ello, la Coordinación Nocturna, en conjunto con las demás coordinaciones de la estructura institucional diseñara cursos, actividades y programas que se traduzcan en beneficios directos a la ECS-UCV y que sirvan para su proyección. Esto pasa por “abrir” la Escuela a la comunidad con cursos, eventos y talleres que permitan “hacer sonar” la Institución y recuperar el espacio perdido.

Unas líneas gruesas
Para tener éxito en esta propuesta es necesario planificar con mucho cuidado. Aunque creo que esto tiene que ser “construido” en colectivo con la comunidad, preliminarmente se pueden trazar unas líneas gruesas que determinen el trabajo que luego se emprenderá.
En primer lugar, debe estudiarse (antes de cualquier propuesta) la conformación administrativa y académica del próximo semestre. En otras palabras, saber los horarios, el número de docente y la cantidad de estudiantes. Una vez obtenido esos datos podrán planificarse en conjunto estudiantes y profesores en los siguientes ámbitos:
· Docencia:
a) Asesoramiento Académico: En este ítem particular deberán diseñarse cursos residuales o charlas de orientación para alumnas y alumnos con problemas en materias y asignaturas específicas
b) Apoyo técnico a docentes y estudiantes: En articulación con la Coordinación de Audiovisual, la Coordinación Nocturna brindará apoyo técnico a docentes y estudiantes para sus clases, presentaciones, utilización de recursos para eventos, entre otros
· Investigación:
a) Ayuda en tesis de grado: En esta sección se planificarán actividades permanentes para el apoyo en Metodología de la Investigación y en Redacción Académica de anteproyectos y proyectos de investigación de los trabajos de grado para todo estudiante que lo solicite
b) Discusión permanente de las líneas de investigación: El turno de la noche se constituirá en un espacio para el diálogo y la discusión de las líneas de investigación que han determinado los Departamentos y las Cátedras, tanto para la realización de trabajos de grado como para el fortalecimiento de los saberes. Para ello, se organizarán periódicamente Jornadas de Investigación en la cual se mostrarán los trabajos más recientes de profesores y alumnos. Esto también podría nutrir los proyectos de reactivación de las dos publicaciones (paralizadas desde hace más de cuatro años) de la ECS-UCV: la revista Mediática y el periódico Pauta Libre
· Extensión:
a) Cine-Foro ECS-UCV: En alianza estratégica con la Cinemateca Nacional y otras instituciones se concretará un viejo anhelo de la Escuela: una programación cinematográfica permanente. En conjunto con los estudiantes y la Cátedra de Cine, se diseñará la planificación y la operación de tan importante actividad para la formación crítica del alumnado.
b) Taller Literario ECS-UCV: Aprovechando en capital del Departamento de Lengua y Literatura se lanzará el Taller Literario ECS-UCV, el cual brindará a estudiantes y a la comunidad en general la oportunidad de asistir a actividades periódicas en esta materia, como charlas de creación y expresión literaria, apreciación de obras, construcción colectiva, edición y diseño de publicaciones
c) Cursos de Extensión ECS-UCV: Tanto para el estudiantado como para el público en general, la ECS-UCV ofrecerá cursos de extensión los cuales no sólo beneficiarán a la Escuela sino que también servirán para su proyección institucional. Dichos cursos podrían incluir: edición de revistas, diseño de publicaciones, talleres de retórica para abogados, cursos de redacción académica, educación crítica para los medios, entre otros que ofrezcan Departamentos y Cátedras
d) Tertulias Académicas ECS-UCV: También en conjunto se desarrollará una serie de encuentros para discutir sobre temas de importancia para la comunidad académica, tales como el papel del periodista en la sociedad contemporánea, la necesaria actualización del currículum de la Escuela, la educación de la Comunicación Social hoy, entre otros

Este no es un conjunto de promesas. Nada que ver. Es el compromiso de quien suscribe de iniciar un trabajo en conjunto con toda la comunidad de la ECS-UCV para transformar la institución y adaptarla a los nuevos tiempos. Es el anuncio de un posible pacto para buscar vías para hacer de nuestra Escuela un centro de pensamiento crítico que rompa con las cadenas del pensamiento único, que elimine la apatía y dé lugar a la recuperación la academia. Nada de esto será posible en solitario y sin la integración de toda la comunidad, especialmente el estudiantado, objetivo fundamental de esta empresa.

Antonio Núñez Aldazoro
21 de junio de 2008